El proyecto conectará la cuenca neuquina con la costa atlántica de Río Negro, e incluirá la instalación de una terminal petrolera en el golfo San Matías.
Así lo adelantó el gobernador electo, Alberto Weretilneck en el Congreso de Producción y Desarrollo de Reservas del Instituto Argentino del Petróleo y del Gas (IAPG) que se desarrolla en la ciudad de Buenos Aires.
La mesa "político-técnica" permitirá definir el manejo de las centrales de Alicurá, El Chocón, Arroyito y Planicie Banderita, desarrolladas sobre los ríos Limay y Neuquén
Se trata de los bloques Confluencia Norte, Confluencia Sur y Cinco Saltos Norte, con una superficie de 400 kilómetros cuadrados. Las áreas fueron licitadas a las empresas Kilwer y Pan American Energy (PAE).
Lo hizo en la licitación de la Línea de Alta Tensión ALIPIBA II. Las obras contempladas implicarán una inversión de 75 millones de pesos para una traza de 140 kilómetros de longitud entre las provincias de Neuquén y Río Negro, y generará una mejora del servicio eléctrico para 160.000 habitantes.
Se analiza la creación de una doble vía para el trazado que une a la Ruta Nacional 151 con el núcleo central en Vaca Muerta, muy afectado por el paso de camiones y de maquinaria pesada.
Hay 22 represas en todo el país que tienen sus concesiones privatizadas desde la década del 90 y que a partir de agosto comienzan a vencerse. En la Patagonia, los estados provinciales reclaman quedarse con las concesiones.
La ley aprobada establece las condiciones para llevar adelante el proceso de licitación pública de alrededor de 625 mil hectáreas en la zona de Sierra Grande para la producción de hidrógeno verde.
El tratamiento del proyecto se hará en la próxima sesión extraordinaria. La empresa australiana Fortescue anunció en noviembre una inversión en el país por US$ 8.400 millones para producir hidrógeno verde en una planta de Sierra Grande