El Rojo se sintió perjudicado en la final que perdió 3 a 0 en Carmen de Patagones ante Bolívar, el caballo del comisario, el equipo de Tinelli que ascendió al Federal A. Con el partido 0 a 0, el conjunto capitalino protestó un penal y acto seguido vio la roja Mauri Villa, el emblema. Allí cambió la historia.
El Rojo hizo un primer tiempo muy digno, que culminó con el marcador en blanco y en el juego tampoco se sacaron grandes diferencias.
Ante un equipo con mayor presupuesto y un sospechado árbitro, Pablo Núñez, que todas las divididas pitó para el conjunto que cuenta con un alto presupuesto y el apoyo de Marcelo Tinelli, Independiente estuvo muy a la altura y hasta contó con algunas chances.
Claro que la iniciativa corrió por cuenta del elenco bonaerense, que dependió mucho de lo que pudiera generar su figura Izaguirre y llenó de pelotazos a Troncoso, el ex delantero de Maronese y Rincón que terminaría siendo figura aunque con algunos gestos que no cayeron bien del lado neuquino.
De entrada se produjo el único gran susto para el elenco neuquino, con ese gol anulado a Bolívar.
A los 25 le faltó puntería a Mauri Villa en una de las mejores ocasiones para Independiente. En el último tramo Bolívar apretó con más empuje que ideas y merodeó la apertura. Primero Troncoso no llegó a empujar un centro y luego Julio López se jugó la vida para impedir un remate de Izaguirre con destino de red.
En el complemento todo se complicó para el equipo de Guillermo Doglioli. De una jugada que parecía penal para Independiente tras remate de Vivanco, vino la expulsó a Villa, que ya tenía amarilla, por protestar. Esto descontroló a Independiente que perdió la cabeza.
Con uno más Bolívar se le fue encima y se puso arriba cerca de los 20 minutos tras un córner que parecía saque de arco. Un conocido de la zona, Troncoso anotó el gol. Todo se le hizo muy cuesta arriba a Independiente, que preso de los nervios igual se lanzó en busca de la igualdad con mucho amor propio, pero en una contra Peters liquidó el partido.
En el final Troncoso marcó el tercero y según los jugadores del Rojo se excedió en el festejo. Luego el caos, la furia, la violencia injustificada más allá de la bronca y encontronazos...