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Destacan la importancia de analizar la carne al elaborar o comprar chacinados

Desde el CIPPA impulsan la campaña de prevención de Triquinosis en Neuquén, instando a productores, elaboradores y consumidores a ser responsables en todo el proceso para evitar problemas de salud asociados a la carne infectada con este tipo de parásitos.

En temporada invernal se incrementa la faena para la elaboración de chacinados con carne de cerdos domésticos y jabalíes y aumenta el riesgo de propagación de triquinosis. Ante esta situación, desde el Control de Ingreso Provincial de Productos Alimenticios (CIPPA) se activó una campaña específica de prevención de esta enfermedad en el territorio neuquino ya que puede generar complicaciones peligrosas para la salud.

La médica veterinaria Ana Bogado, directora técnica operativa del CIPPA, hizo un llamado a todos los sectores involucrados -productores, elaboradores y consumidores- a seguir una serie de recomendaciones para prevenir la triquinosis y proteger la salud de la población.

«La triquinosis es causada por la ingestión de carne que contiene parásitos», informó y explicó que «los cerdos pueden infectarse al consumir carnes contaminadas». Factores como la presencia de ratas, la falta de limpieza y el manejo inadecuado de alimentos favorecen la transmisión de la enfermedad.

Por tal motivo desde el organismo dependiente de la Secretaría de Producción e Industria se insta a los productores a mantener altos estándares de higiene y control para prevenir la infección en sus animales.

En tanto, a los elaboradores de chacinados se les recuerda que es fundamental analizar la carne de cerdos y jabalíes en veterinarias o áreas de Bromatologías a nivel municipal. Los animales infectados con el parásito pueden parecer sanos, ya que las larvas no son visibles a simple vista y no alteran las características de los alimentos. Solo mediante un análisis de laboratorio se puede garantizar que la carne es segura para el consumo.

Se recomienda a la población no comprar productos ofrecidos en la venta callejera, ya que su origen es desconocido y no poseen certificación, representando un alto riesgo para la salud. A los consumidores se les solicita que adquieran chacinados o embutidos de origen porcino o de fauna silvestre cuya carne haya sido inspeccionada y certificada por Senasa u organismos provinciales o municipales.

Los signos clínicos de la triquinosis son: Fiebre, dolores musculares, hinchazón de párpados, erupción en la piel, diarrea y vómitos y decaimiento similar a la gripe. En determinados casos puede llevar a complicaciones peligrosas e incluso mortales, como: Miocarditis, encefalitis o meningitis.

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